Soy hincha hasta la muerte de...

Buenas... Esta entrada está dedicada a todos los que son hinchas hasta la muerte de un equipo o conocen gente así que siempre va a los estadios, alienta hasta la muerte, llora por las derrotas, etc. Se dice que el 80% de las charlas incluyen: fútbol, religión y política, que son justamente los temas que producen más polémica. En el caso del fútbol, uno puede encontrar diversos tipos de personas respecto al fútbol: los que lo siguen, los que lo aman, o los que son fanáticos. En la siguiente entrada hablaré y diré todo sobre ellos unido obviamente a mi infaltable opinión.
Para poder hablar de ellos tenemos que hablar y explicar sus características. Son aquellos que todo lo ven fútbol, literalmente todo, como si el mundo solo tuviera sentido con fútbol. Luego son los que llegan a ofenderse si se habla mal de su club favorito o de una opinión planteada. Son los que celebran las derrotas del rival más que las victorias de tu equipo. Son los que van a todos los partidos no importa donde sea. Son los que si pierden se pone a llorar como si fuese la muerte de un familiar muy cercano, y los que considera a los jugadores de su equipo verdaderos Dioses.
Obviamente existen los que yo llamo "fanáticos suaves" que son los que se toman un poco el fanatismo más calmado. Los que sí, ven los partidos por la televisión, hablan del partido con sus amigos después de verlo, y si la derrota llega a ser demoledora se llega a disgustar un poco. Los que le dan un día para el fútbol pero nada más; después son personas comunes y corrientes. Lamentablemente hay algunos peores incluso a los de arriba, y en Europa fueron bautizados con el nombre de Hooligans.
Los Hooligans fueron las supuestas hinchadas de los equipos más emblemáticos de Inglaterra. Causaban desmanes y destrozos cada vez que su equipo perdía. Las peleas con la hinchada visitante eran terribles. Por suerte con el paso de los años se llegó a controlar eso y ahora todos los que una vez fueron hooligans ya no  pueden ir a ningún evento deportivo. En Sudamérica todavía hay barras bravas, pero que lamentablemente siguen en lo mismo, y las autoridades no hacen nada. Ojalá esto cambie pronto y el fútbol sea lo que es y no una causa absurda para pelearse.
Bueno amigos eso ha sido todo por hoy espero que les haya gustado o interesado tanto como a mí. Confieso que en algún momento me volví muy aficionado al fútbol. Aún lo soy, pero al fútbol le tengo un día especial en la semana donde nadie me puede molestar. Por favor sigan pasando el link del blog a todos sus amigos y/o conocidos que tenemos que ser más. Bueno hora de irme, muchas gracias a todos y que tengan muy buenas noches.